Han pasado los días y, si ayer era una manera de empezar, pronto será la de aprender a terminar. Pero este verano me gustaría superar esa sensación de que el tiempo va pasando, ni siquiera que he consumido este mes bendito de descanso en el que, eso sí, la vida parece de otra manera. Un espejismo, nada más y nada menos. En cualquier caso, me permito el lujo de escribirte sin ataduras, ni siquiera las de reloj, para decirte que me siento bien y que, por fin, sí he aprendido que el azul es bien distinto dependiendo del día que se levante. Algo tan estupendo para esas personitas que somos tú y yo.
hola petardillo, lo de zahara se nos termina, pero yavendran más años D.M., espero estar en contacto contigo en esta super aventura. Un saludo campeón.
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